Es el tratamiento usado para las patologías DMAE (Degeneración Macular Asociada a la Edad) húmeda que consiste en la aplicación de una inyección que se debe realizar en quirófano siempre bajo unas condiciones de asepsia máximas. Se realiza con anestesia tópica (gotas) y generalmente no produce molestias.
Es necesario realizar previamente un completo estudio oftalmológico que incluya un fondo de ojo. Actualmente se realiza siempre una tomografía de coherencia óptica y en algunas ocasiones se realiza angiografía fluoresceínica.
Las enfermedades inflamatorias del ojo, como las uveítis, deben tratarse con fármacos antiinflamatorios que generalmente empiezan con corticoesteroides, y si no es suficiente, deben emplearse inmunosupresores, sobre todo para reducir los efectos secundarios de los corticoides. En los últimos años, han aparecido nuevos fármacos inmunosupresores más específicos, más eficaces y con menos efectos secundarios adversos generales que son los llamados fármacos biológicos.
El objetivo de esta terapia es prevenir la muerte de las células de la retina en el tratamiento del glaucoma.